- «Ten compasión de nosotros, hijo de David.»
Al llegar a la casa se le acercaron los ciegos, y Jesús les dijo:
- «¿Creéis que puedo hacerlo?»Contestaron: - «Sí, Señor.»Entonces les tocó los ojos, diciendo:- «Que os suceda conforme a vuestra fe.»Y se les abrieron los ojos. Jesús les ordenó severamente:- «¡Cuidado con que lo sepa alguien!»Pero ellos, al salir, hablaron de él por toda la comarca.
Sal 26 El Señor es mi luz y mi salvación…
ResponderEliminarTiempo de adviento..
Tan propicio para decir,
el Señor es mi luz y mi salvación..
Tú mi luz..
Jesús, luz interior,
no dejes que mis tinieblas me hablen,
me atrapen..
Jesús, luz interior,
ayúdame a acoger SIEMPRE tu amor..
MAESTRO, QUE VEA..
Con la fe que tengo, no podré ver bien
ResponderEliminarpor mucho que Tú me toques, por que me
falta esa confianza plena, pero sé que
te seguiré buscando, o mejor dicho, me
seguirás buscando y....
Escribo desde mi teclado Braille..
ResponderEliminarquiero sumarme a este grupo de ciegos... un poco "pesaditos" los pobres y tan necesitados
( ¿¿ A quien me recordarán?? Juas juas .. jejeje))... para pedir a grito pelao y en plural.
¡¡Hombre que no!!
No vaya a ser que nos pille en otro lado buscando rebajas en..en..en el Carrefour por ejemplo , y nos perdamos esa preciosa conversión.
¡¡ Y en el Carrefour no venden gafas con 40 dioptrías de culo de vaso para el corazón!!
Un abrazo de oso.
Si mi vista depende de mi grado de fe, soy más ciega que un gato de escayola, pero no estoy sola, también los ciegos iban de dos en dos, en comunidad, yendo juntos se hace la Luz, tal vez a veces no sepamos a dónde nos lleva pero la vemos con mucha más nitidez y nos atrae y nos da calor y nos alimenta y nos transforma y nos..., y nos hace fieles hasta el fín.
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