4 de octubre de 2010

Marta..Marta..

En aquel tiempo, entró Jesús en un poblado, y una mujer, llamada Marta, lo recibió en su casa. Ella tenía una hermana, llamada María, la cual se sentó a los pies de Jesús y se puso a escuchar su palabra. Marta, entre tanto, se afanaba en diversos quehaceres, hasta que, acercándose a Jesús, le dijo:

«Señor, ¿no te has dado cuenta de que mi hermana me ha dejado sola con todo el quehacer?
Dile que me ayude».
El Señor le respondió:
«Marta, Marta, muchas cosas te preocupan y te inquietan, siendo así que una sola es necesaria. María escogió la mejor parte y nadie se la quitará»

4 comentarios:

  1. La mejor parte..
    Estar contigo, Señor,
    abrirse a tu presencia en medio de lo cotidiano,
    contemplar con amor tu ser entre nosotros,
    aprovechar cada instante como una puerta
    para entrar en la plenitud de vida eterna que nos ofreces..
    Marta y María, cualquiera de las dos,
    centradas en ti, prefiriéndote en todo a ti,
    sin descuidar la vida que corre entre sus manos..
    La mejor parte..

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  2. Cuando te encuentras con Jesús, lo importante es escucharle.
    Para que EL transforme nuestro interior,
    Y así nuestras acciones y actitudes tengan sentido
    Es necesaria la apertura y disponibilidad a la palabra y hacerla vida.
    No hay mejor ni peor parte.

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  3. Parece que Jesús no piensa que la
    cocina es el único lugar para las
    mujeres.
    Igual que Jesús hizo de María de
    Betania una discípula, todas las
    mujeres son llamadas a seguirle...
    Como María de Nazaret dio a Jesús
    al mundo, así deben hacerlo también
    todas las mujeres.

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  4. Marta es una mujer atada todavía a lo que
    decía la Torá, la ley.
    María en cambio, transgredió las normas,
    su postura a los pies de Jesús indica que
    su actitud es de DISCÍPULA, que como
    tantas otras mujeres escuchan a Jesús y
    nos iluminan con sus experiencias.

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