16 de julio de 2011

Quien tenga oidos, que oiga..

En aquel tiempo, Jesús propuso otra parábola a la gente: «El reino de los cielos se parece a un hombre que sembró buena semilla en su campo; pero, mientras la gente dormía, su enemigo fue y sembró cizaña en medio del trigo y se marchó. Cuando empezaba a verdear y se formaba la espiga apareció también la cizaña. Entonces fueron los criados a decirle al amo: "Señor, ¿no sembraste buena semilla en tu campo? ¿De dónde sale la cizaña?" Él les dijo: "Un enemigo lo ha hecho." Los criados le preguntaron: "¿Quieres que vayamos a arrancarla?" Pero él les respondió: "No, que, al arrancar la cizaña, podríais arrancar también el trigo. Dejadlos crecer juntos hasta la siega y, cuando llegue la siega, diré a los segadores: Arrancad primero la cizaña y atadla en gavillas para quemarla, y el trigo almacenadlo en mi granero."»

Les propuso esta otra parábola: «El reino de los cielos se parece a un grano de mostaza que uno siembra en su huerta; aunque es la más pequeña de las semillas, cuando crece es más alta que las hortalizas; se hace un arbusto más alto que las hortalizas y vienen los pájaros a anidar en sus ramas.»

Les dijo otra parábola: «El reino de los cielos se parece a la levadura; una mujer la amasa con tres medidas de harina y basta para que todo fermente.»

Jesús expuso todo esto a la gente en parábolas y sin parábolas no les exponía nada. Así se cumplió el oráculo del profeta: «Abriré mi boca diciendo parábolas; anunciaré los secretos desde la fundación del mundo.»

Luego dejó a la gente y se fue a casa. Los discípulos se le acercaron a decirle: «Acláranos la parábola de la cizaña en el campo.»

Él les contestó: «El que siembra la buena semilla es el Hijo del Hombre; el campo es el mundo; la buena semilla son los ciudadanos del reino; la cizaña son los partidarios del maligno; el enemigo que la siembra es el diablo; la cosecha es el fin del tiempo, y los segadores los ángeles. Lo mismo que se arranca la cizaña y se quema, así será el fin del tiempo: el Hijo del Hombre enviará sus ángeles y arrancarán de su reino a todos los corruptos y malvados y los arrojarán al horno encendido; allí será el llanto y el rechinar de dientes. Entonces los justos brillarán como el sol en el reino de su padre. El que tenga oídos, que oiga.»













3 comentarios:

  1. La cizaña y el trigo crecen juntas en nuestro interior
    somos personas más o menos buenas,
    con nuestros aciertos y errores.

    Si descubrimos nuestros fallos,
    Podremos aceptar a los demás con los suyos.

    No son los fallos lo que nos hacen inhumanos,
    es la falta de comprensión y el aceptar al otro con sus fallos,
    Esto es lo que nos aleja del camino de JESUS.

    Nuestro objetivo no es alcanzar la perfección,
    sino descubrir al otro como hermano entrañable.

    ResponderEliminar
  2. “dejadlos crecer juntos”
    una llamada a la tolerancia.
    tolerancia es respeto y valoración de la persona,
    por encima de discrepancias, de actitudes contrarias, de agresiones recibidas…..

    ResponderEliminar
  3. "ser fermento"
    Dios no se impone desde fuera,” sino que transforma a las personas desde dentro”.
    No domina con su poder,” sino que atrae con su amor hacia el bien”.
    No fuerza la libertad de nadie” sino que se ofrece para hacer más dichosa nuestra vida”.
    aprendamos a vivir la fe de manera humilde, sin hacer mucho ruido, ni dar grandes espectáculos,
    no tengamos deseos de poder ni de prestigio,
    no gastemos nuestras fuerzas en grandes operaciones de imagen,
    tratemos de vivir como "fermento" de vida en medio de la sociedad,
    para impregnar de evangelio la vida moderna.
    “Busquemos lo esencial, caminar en la verdad de Jesús”.

    ResponderEliminar