2 de julio de 2012

Dichoso el que cree sin haber visto..

Tomás, uno de los Doce, llamado el Mellizo, no estaba con ellos cuando vino Jesús. Y los otros discípulos le decían: "Hemos visto al Señor." Pero él les contestó: "Si no veo en sus manos la señal de los clavos, si no meto el dedo en el agujero de los clavos y no meto la mano en su costado, no lo creo."
A los ocho días, estaban otra vez dentro los discípulos y Tomás con ellos. Llegó Jesús, estando cerradas las puertas, se puso en medio y dijo: "Paz a vosotros." Luego dijo a Tomás: "Trae tu dedo, aquí tienes mis manos; trae tu mano y métela en mi costado; y no seas incrédulo, sino creyente." Contestó Tomás: "¡Señor mío y Dios mío!" Jesús le dijo: "¿Porque me has visto has creído? Dichosos los que crean sin haber visto."

3 comentarios:

  1. A Tomás le costó creer..
    Como a Pedro le costó ser fiel..
    Como a mi tb m cuesta..
    La fe siempre es un salto..
    Parte de un “ver” para llegar a “creer”..
    “Señor mío y Dios mío”..

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  2. Mucho he oído y aprendido sobre Jesús,
    dudo,no creo,me rebelo.........pero
    si le busco con un corazón humilde y sincero.
    le descubriré vivo en mi interior,
    haciéndome participe de su misma Vida,
    "Dichoso el que cree, sin haber visto".

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  3. Dudamos, nos cuesta creer,
    nos agobiamos, no nos fiamos………
    El Señor comprende nuestra impotencia,
    nuestras debilidades,
    pero tiene sus caminos para encontrarse con cada uno de nosotros ,
    para ofrecernos la paz,la vida,la fuerza,
    la liberación,la confianza.......

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