18 de septiembre de 2012

Miramos para otro lado..

En aquel tiempo, dijo el Señor: «¿A quién se parecen los hombres de esta generación? ¿A quién los compararemos? Se parecen a unos niños, sentados en la plaza, que gritan a otros: "Tocarnos la flauta y no bailáis, cantamos lamentaciones y no lloráis." Vino Juan el Bautista, que ni comía ni bebía, y dijisteis que tenía un demonio; viene el Hijo del hombre, que come y bebe, y decís: "Mirad qué comilón y qué borracho, amigo de publicanos y pecadores." Sin embargo, los discípulos de la sabiduría le han dado la razón.»

2 comentarios:

  1. Dos formas distintas de entender la vida:
    Juan Bautista: vivía en el desierto, vestía y
    comía con radical austeridad.
    Jesús: vivía entre la gente, vestía una túnica
    valiosa y asistía a bodas y banquetes sin reparo alguno.
    Está claro que para Jesús, lo más importante
    no son sacrificios y renuncias, sino contagiar
    vida y felicidad a los demás.

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  2. El mensaje es sencillo y radical,
    habla del amor, el amor es entrega total,
    no impuesto ni obligado , brota de dentro,
    muchas veces miramos para otro lado ,
    tranquilizamos nuestras conciencias con cumplimientos ,
    y seguimos viviendo como antes,
    con nuestra pequeños odios y rencores, egoísmos……..
    y nos alejamos del mensaje,
    sin comprender que lo que Jesús nos ofrece,
    vivir una vida verdaderamente plena y feliz.

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