24 de febrero de 2010

Pedid y se os dará..

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:

-«Pedid y se os dará, buscad y encontraréis, llamad y se os abrirá; porque quien pide recibe, quien busca encuentra y al que llama se le abre.
Si a alguno de vosotros le pide su hijo pan, ¿le va a dar una piedra?; y si le pide pescado, ¿le dará una serpiente? Pues si vosotros, que sois malos, sabéis dar cosas buenas a vuestros hijos, ¡cuánto más vuestro Padre del cielo dará cosas buenas a los que le piden!
En resumen: Tratad a los demás como queréis que ellos os traten; en esto consiste la Ley y los profetas.»

4 comentarios:

  1. Hoy la Palabra nos recuerda el "poder" de la oración.. Un "poder" q transforma nuestra propia vida, q va convirtiendo nuestro corazón de piedra en un corazón de carne.. Un "poder" q nos hace encontrar la paz, q nos hace tener la experiencia de sentirnos hij@s amad@s..
    Por eso, el mensaje no es: “pedid para que os dé”.. El mensaje del Evangelio de hoy es: “soy Padre, siempre estoy a la escucha, sólo quiero lo mejor para vosotros; poneos en actitud de contar conmigo, de recibir todo lo que estoy deseando daros, de aprovechar todas los puertas que os puedo abrir, de aprender cómo os trato para que tratéis así a los demás..”

    ResponderEliminar
  2. Cuando leo en tu palabra: "Pedid y
    se os dará, buscad y encontraréis,
    llamad y se os abrirá..."
    Entiendo que tenemos que ser humildes
    y pedirnos, buscarnos, llamarnos entre
    nosotros, porque Tú estás en todos y
    cada uno y desde ahí nos ayudas, si nos
    dejamos hacer por Ti.

    ResponderEliminar
  3. La vida espiritual es un don que
    hay que pedir, no se da sin esfuerzo
    por nuestra parte, sin una búsqueda
    consciente de las cosas de arriba.
    Para aquellos que realmente la buscan,
    la vida ante Dios comienza aquí y ahora.

    ResponderEliminar
  4. Tú das cosas buenas a los que te las piden,
    Escucha nuestra oración.
    Danos un corazón sencillo, humilde, confiado,
    que sepa abandonarse en ti.
    Ven, a ensanchar en nosotros tu reino de paz.
    Ayúdanos para que podamos llevar a todos tu amor,danos tu Espíritu para que encontremos tu rostro.Tú abres al que llama:
    Ábrenos la puerta de tu corazón a nosotros y a todos los hombres.
    Hagase tu voluntad en la tierra como en el cielo.

    ResponderEliminar