5 de septiembre de 2010

Dejarlo TODO..Ganarlo TODO..

En aquel tiempo, mucha gente acompañaba a Jesús; él se volvió y les dijo: «Si alguno se viene conmigo y no pospone a su padre y a su madre, y a su mujer y a sus hijos, y a sus hermanos y a sus hermanas, e incluso a sí mismo, no puede ser discípulo mío. Quien no lleve su cruz detrás de mí no puede ser discípulo mío. Así, ¿quién de vosotros, si quiere construir una torre, no se sienta primero a calcular los gastos, a ver si tiene para terminarla? No sea que, si echa los cimientos y no puede acabarla, se pongan a burlarse de él los que miran, diciendo: "Este hombre empezó a construir y no ha sido capaz de acabar." ¿O que rey, si va a dar la batalla a otro rey, no se sienta primero a deliberar si con diez mil hombres podrá salir al paso del que le ataca con veinte mil? Y si no, cuando el otro está todavía lejos, envía legados para pedir condiciones de paz. Lo mismo vosotros: el que no renuncia a todos sus bienes no puede ser discípulo mío.»

4 comentarios:

  1. Al que sigue a Jesús de verdad,
    dejándolo todo,
    el corazón se le agranda
    hasta que se le hace tan grande como el mundo..
    Ese es el momento paradójico
    en que habiéndolo dejado todo
    lo vuelve a ganar todo..

    ResponderEliminar
  2. Jesús quiere personas libres
    y dueñas de sí mismas que,
    atraídas por su causa, se
    empeñen en llevarla adelante,
    con los valores del evangelio.

    ResponderEliminar
  3. “Si alguno quiere venirse conmigo…..”
    Jesús no impone nada, simplemente propone
    Nos invita a ser fermento en medio del mundo
    Y sal para dar un nuevo sabor a la vida de las personas

    ResponderEliminar
  4. Mi experiencia personal es que cuanto más opto por Jesús ante mi marido y mis hijos, más unida me siento a ellos y más fuerte y feliz es nuestra vida,y yo misma

    ResponderEliminar