En aquel tiempo, se acercaron los discípulos de Juan a Jesús, preguntándole: - «Por qué nosotros y los fariseos ayunamos a menudo y, en cambio, tus discípulos no ayunan?» Jesús les dijo: -«¿Es que pueden guardar luto los invitados a la boda, mientras el novio está con ellos? Llegará un día en que se lleven al novio, y entonces ayunaran.»
Jesús nos trajo la liberación y esta con nosotros.
ResponderEliminarintentemos descubrir la novedad del evangelio.....
vivamos con alegría y esperanza este espacio de tiempo que nos toca vivir.
Nos cuesta relacionar a Dios con
ResponderEliminarla fiesta, el banquete y la mesa
compartida, y es que se nos habla
más de su poder, de su justicia.
Necesitamos una nueva mentalidad
para abrirnos a la alegría que nos
trae el Evangelio de Jesús.
“El ayuno que yo quiero es éste: Abrir las prisiones injustas, dejar libres a los oprimidos, romper todos los cadenas; partir mi pan con el hambriento, hospedar a los pobres sin techo, vestir al que vea desnudo, y no cerrarme a mi propia persona.
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