En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
- «Os aseguro que lloraréis y os lamentaréis vosotros, mientras el mundo estará alegre; vosotros estaréis tristes, pero vuestra tristeza se convertirá en alegría.
La mujer, cuando va a dar a luz, siente tristeza, porque ha llegado su hora; pero, en cuanto da a luz al niño, ni se acuerda del apuro, por la alegría de que al mundo le ha nacido un hombre. También vosotros ahora sentís tristeza; pero volveré a veros, y se alegrará vuestro corazón, y nadie os quitará vuestra alegría. Ese día no me preguntaréis nada.»
NADIE NOS QUITARÁ LA ALEGRÍA..
ResponderEliminarPorque será una alegría que se asienta en lo más verdadero del corazón,
una alegría profunda, una alegría regalada por Ti,
una alegría que tiene en ti su raíz y su culminación..
Tú eres la causa de nuestra alegría, Señor..
Tú has vencido nuestras tristezas y nuestras muertes,
tú nos llamas a vivir de tu resurrección..
En la nuestra vida, a veces nos angustiamos por cosas: el trabajo, el dolor, un sueño,un proyecto......
ResponderEliminarpero lo cierto es que nada, ni nadie puede hacer desaparecer del corazón de la persona:
la confianza,la esperanza,la alegría y la fortaleza, que sentimos si caminamos por la vida apoyados en "EL"
EL nos da la alegría de vivir y saborear esa vida nueva.
Buscamos seguridades y eso nos
ResponderEliminarangustia, sólo la confianza nos
devuelve la alegría.