En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
-«Tened ceñida la cintura y encendidas las lámparas. Vosotros estad como los que aguardan a que su señor vuelva de la boda, para abrirle apenas venga y llame.
Dichosos los criados a quienes el señor, al llegar, los encuentre en vela; os aseguro que se ceñirá, los hará sentar a la mesa y los irá sirviendo.
Y, si llega entrada la noche o de madrugada y los encuentra así, dichosos ellos.»
Hoy podemos pedirle al Señor
ResponderEliminarque nos conceda la sabiduría
de vivir la duración..
"Ese tiempo que es muy lento para los que esperan
y muy corto para los que gozan (Shakespeare)"
Ser discípulo de Jesús no es
ResponderEliminarun trabajo a tiempo parcial.
El mundo sigue esperando el
Reino y nosotros somos los
enviados para llevarlo adelante.
Los pobres, los perdidos, los
que sufren nos están esperando
para que signifiquemos ente
ellos la presencia de Jesús.
Hay que estar despiertos….
ResponderEliminarNo podemos pasar la vida dormidos….
Tenemos que vivir el momento presente…..
Porque en un momento, puedo experimentar tu presencia dentro de mi, sería el momento definitivo de mi vida.