En aquel tiempo, dijo Jesús a sus
discípulos:
- «Como
el Padre me ha amado, así os he amado yo; permaneced en mi
amor.
Si guardáis mis mandamientos, permaneceréis
en mi amor; lo mismo que yo he guardado los mandamientos de mi Padre y
permanezco en su amor.
Os he hablado de esto para
que mi alegría esté en vosotros, y vuestra alegría llegue a
plenitud.»
Repetir despacio este evangelio,
ResponderEliminarpara creerlo y vivirlo en Ti..
Si seguimos a Jesus y nos fiamos de EL,
ResponderEliminaren nuestro interior sentiremos la paz,
y estaremos contentos y felices.
EL nos eligió para que seamos portadores,
de esa felicidad y alegría para los demás hombres.
El amor no es un sentimiento.
ResponderEliminarEl amor es una decisión.
Tampoco esa alegría de la que nos
habla Jesús es un simple sentimiento
pasajero; se trata de un estado
permanente de plenitud y bienestar,
por haber encontrado tu verdadero ser.