En aquel tiempo, pasando Jesús junto al lago de Galilea, vio a dos
hermanos, a Simón, al que llaman Pedro, y a Andrés, su hermano, que estaban
echando el copo en el lago, pues eran
pescadores.
Les
dijo:
-«Venid y seguidme, y os haré pescadores de
hombres.»
Inmediatamente dejaron las redes y lo
siguieron.
Y, pasando adelante, vio a otros dos
hermanos, a Santiago, hijo Zebedeo, y a Juan, que estaban en la barca repasando
las redes con Zebedeo, su padre. Jesús los llamó
también.
Inmediatamente dejaron la barca y a su
padre y lo siguieron.
A Andrés le ofrece un nuevo oficio:
ResponderEliminarser “pescador de hombres”..
Seguirá siendo pescador:
habrá que seguir esforzándose, madrugar y embarcar;
habrá que seguir teniendo una sensibilidad fina
como para saber cuándo y dónde echar la red;
habrá que seguir teniendo fuerza como para tirar cuando haga falta;
habrá que seguir repartiendo el fruto del trabajo,
unos días más y otros menos..
Pero ya no serán los peces el centro de la vida, sino las personas..
Ya no habrá redes, sino palabras..
Y ya no habrá una pequeña barca,
sino que se trata de que todos vayamos en el mismo barco..
Sobre todo en las cosas importantes..
A mi también el Señor me invita a pescar,
ResponderEliminara seguirlo, a no mirar atrás,a cambiar mi interior,
a ayudar a los necesitados.....
me invita a ser alguien,
a ocupar mi lugar en este mundo,
me llama a mi personalmente por mi nombre.
"Abre mis oídos para oír tu llamada,
y valentía para seguirte."